LA ESTACION ( 2 )
Cuando marcho de la ciudad, en ella ya no le quedaba nadie, y se estabecio aqui,
lo primero que hizo fue crearse unos deberes diarios y uno de ellos fue la visita
a la estacion. Y ver la llegada del tren.
Todas esas rutinas le ayudaron los primeros años a sobrellevar la soledad.
Soledad que por cierto el mismo se habia buscado aunque en los primeros tiempos
habia protestado y refunfuñado muchisimo, pero como todo, al final uno se acaba
acostumbrando a todo.
Pero entre la montaña, la pesca y sus visitas diarias a la estacion habia encontrado
un minimo equilibrio que le permitio sino ser feliz, al menos poder ir tirando sin
que su mente le jugara malas pasadas.
Ya se sabe que quien dia pasa, año empuja.
Al menos aqui su vida transcurria placidamente, sin sobresaltos ni presencias que
turbaran su espiritu y eso era algo que el siempre habia buscado.
Tranquilidad y esperanza, sus dos palabras magicas.Cuando su mente se revelaba, siempre
acudia a la tranquilidad para apaciguarla.
Y a la esperanza para suavizar su alma.
Esperanza, bonita palabra.
Le gustaba, porque aunque habian pasado los años, era lo unico que habia permanecido siempre
a su lado. Ni amigos ni familia ni nada de lo que una persona desea.
Nada le habia quedado con el paso de los años.
Solo esperanza.
THESAN
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